La economía española se contrae un 1,8% en su peor trimestre del último medio siglo
El desplome del consumo ya supera los niveles de la crisis de 1993 con un 3,3%. -Zapatero cree que lo peor ha pasado, aunque queda un duro camino por recorrer
AGENCIAS - Madrid - 29/04/2009
La economía española atraviesa su peor recesión en medio siglo, y los últimos datos que se están conociendo no hacen sino confirmar que el final de la crisis está todavía lejos y que queda mucha tormenta que capear. Según ha revelado el Banco de España, el Producto Interior Bruto (PIB) ha aumentado su retroceso al 1,8% en el primer trimestre del año, con lo que empeora su caída hasta el 2,9% frente a los niveles de hace doce meses. De confirmarse estas estimaciones, publicadas en el último boletín de la institución que preside Miguel Ángel Fernández Ordóñez, habría que remontarse al segundo trimestre de 1960, cuando el PIB retrocedió un 1,9%, para encontrar una contracción intertrimestral superior.
El organismo advierte de que hay un "escaso margen de maniobra" para nuevas medidas fiscales
Desde el Gobierno, el presidente, José Luis Rodríguez Zapatero, ha defendido que es "muy problable que lo peor haya pasado", pero ha admitido a continuación que queda "un duro camino por recorrer". Por otra parte, el secretario de Estado de Hacienda, Carlos Ocaña, ha adelantado que el Gobierno ajustará a la baja sus previsiones de crecimiento para este ejercicio, debido a que las perspectivas actuales son peores de las que había cuando se elaboró el Programa de Estabilidad a principios de año. Unas proyecciones que, al igual que ocurre con el desempleo, han quedado ya en papel mojado porque apuntaban a una caída del 1,6% para final de año.
El organismo supervisor, que calcula que el empleo se redujo un 6% en el último año, advierte de que la recesión española se ha agravado por un entorno internacional "severamente recesivo" y en el que el grado de tensión financiera se ha mantenido en niveles "elevados", a lo que hay que unir el empeoramiento del comercio internacional. Además, advierte de que mientras sigue cayendo la actividad en la industria y en la construcción por la crisis, también se están viendo afectados los servicios, sobre todo los de mercado, mientras que el turismo sigue deteriorándose con respecto a 2008.
Al igual que en el último trimestre de 2008, el mayor lastre de la economía española es la contracción de la debilidad interna -consumo e inversión-, que cayó en un año un 4,9%, dos puntos más que en el trimestre anterior. Mientras, la aportación del sector exterior, aunque ha seguido siendo positiva -2,2 puntos-, se ha reducido, debido a la fuerte contracción que está experimentando el comercio mundial y que ha reducido las exportaciones españolas en un 22,1%, apenas tres puntos por debajo del descenso registrados por las importaciones en el mismo periodo.
Para el Banco de España, la causa de este frenazo del consumo, que aumenta al 3,3% frente a los niveles de hace un año, es el deterioro del empleo; y también la elevada incertidumbre ante el futuro de la economía. Además, añade que esta caída no ha podido ser mitigada aún ni por los tipos de interés más bajos ni por la caída de los precios de consumo -apartado en el que sostiene que la posibilidad de una deflación es "remota"-. Dos aspectos positivos que no tendrán efecto en la renta disponible de las familias hasta dentro de unos trimestres, añade el boletín.
El único dato positivo que surge del retraimiento en el consumo es que la tasa de ahorro de los hogares se está recuperando con mucha rapidez, y estaba ya en el 13% de la renta disponible a finales del año pasado.
La inversión, también a la baja
El otro componente de la demanda interna, la inversión, también sigue empeorando. Según explica el Banco de España, la destinada a bienes de equipo agrava su caída por la falta de confianza de la industria y la menor cartera de pedidos por el descenso de la demanda, a lo que se une las mayores dificultades de financiación.
El ajuste de la actividad y la inversión en construcción, por su parte, se ha "agudizado" en el primer trimestre según el organismo supervisor, que basa esta afirmación en la reducción de las casas iniciadas o en la caída de la compraventa. Además, advierte de que su demanda se está viendo "desanimada" por el endurecimiento de las condiciones financieras, la caída de precios y las peores perspectivas de aumento de renta de las familias.
En este punto, aunque reconoce que hay una "cierta mejoría" en los mercados financieros tras el punto máximo de inestabilidad de finales de 2008, las condiciones de crédito han continuado siendo restrictivas. De hecho, los últimos datos del Banco Central Europeo muestran que los bancos comerciales de la zona del euro endurecieron en el primer trimestre las condiciones para conceder créditos a las empresas, aunque en menor medida que en trimestres anteriores.
En cuanto a la actuación del Gobierno frente a la recesión, el Banco de España advierte frente a la opinión de la ministra de Economía, Elena Salgado, de que hay un "escaso margen de maniobra para seguir utilizando la política presupuestaria como instrumento para impulsar la demanda", dado el alto nivel de déficit de las cuentas públicas. Además, contempla un "deterioro adicional de la situación de las finanzas públicas en 2010, con un aumento tanto del déficit como de la ratio de deuda pública en 2009", incluso "en ausencia de nuevas medidas discrecionales de corte expansivo".