Acumula tres recortes consecutivos que han llevado los tipos de interés desde el 4,25% a principios de octubre hasta el 2,5% actual | Trichet destaca el riesgo de que la economía se contraiga aún más | La institución revisa a la baja las previsiones de crecimiento y de inflación para 2009
Frankfurt. (EFECOM).- El Banco Central Europeo (BCE) ha adoptado la mayor rebaja de los tipos de interés de la historia del euro, de 75 puntos básicos, tras constatar el agravamiento de la crisis económica y la significativa moderación de la inflación.
Con la decisión tomada por el Consejo de Gobierno del BCE, el precio del dinero en la eurozona queda en el 2,5%, la tasa más baja desde mayo de 2006.
La autoridad monetaria no descarta recortes adicionales en los próximos meses, aunque el presidente de la entidad, Jean-Claude Trichet, recalcó que esperará a ver el efecto de las decisiones tomadas hasta ahora (una bajada de 175 puntos básicos en los últimos dos meses).
Al término de la reunión celebrada en Bruselas, Trichet hizo hincapié en que, debido sobre todo a las turbulencias financieras, tanto la demanda global como la de la eurozona seguirán dando muestras de debilidad los próximos trimestres.
Según las nuevas previsiones del banco emisor, revisadas a la baja, el PIB de la eurozona crecerá este año entre el 0,8% y 1,2%, mientras que en 2009 la horquilla estará entre una caída de la actividad del 1 por ciento y el estancamiento.
Los riesgos para estas previsiones son, además, "a la baja", recalcó Trichet, que alertó de la posibilidad de un impacto mayor en la economía de la crisis financiera, el aumento de las tendencias proteccionistas y la corrección desordenada de los desequilibrios globales.
Respecto de la inflación, el BCE atribuyó su moderación (en noviembre bajó al 2,1% en la eurozona) a la disminución de los precios de las materias primas y a la significativa desaceleración de la economía.
La institución con sede en Fráncfort prevé que esta tendencia continúe, acercándose al objetivo de estabilidad de precios -por debajo del 2% pero cerca de esa tasa- e incluso podría llegar al entorno del 1% el año próximo.
Trichet recordó, en cualquier caso, que la incertidumbre que rodea a las previsiones es "excepcionalmente elevada" y recalcó que la institución que preside seguirá muy alerta para garantizar el anclaje firme de las expectativas de inflación a medio plazo.
El presidente del BCE no quiso precisar si hubo disensiones en el Consejo de Gobierno sobre la decisión de hoy o apuestas por un recorte mayor y se limitó a señalar que la rebaja de 75 puntos básicos se tomó por "consenso".
Al ser preguntado por la política más agresiva que están aplicando otros bancos centrales, subrayó que "cada uno hace lo que considera apropiado", teniendo en cuenta la situación de su economía, su mandato, sus prioridades y su definición de estabilidad de precios.
Pero resaltó que, en menos de dos meses, la autoridad monetaria europea ha bajado los tipos rectores en 175 puntos básicos (al sumar al recorte de hoy los de las dos reuniones anteriores, de cincuenta puntos cada uno), algo que no había sucedido en ninguno de los países de la moneda única desde la II Guerra Mundial. De cara a su próxima reunión, señaló: "no excluyo nada, pero tampoco me comprometo a nada".
Reconoció, sin embargo, que el mercado de crédito sigue sufriendo tensiones y confió en que pronto empiecen a trasladarse las bajadas de las tasas a todo el canal de crédito, para contribuir a superar la crisis financiera e impulsar la recuperación de la actividad. El presidente del BCE también se refirió en la rueda de prensa a las medidas de política económica para combatir la recesión y pidió una aplicación rápida de las mismas para ayudar a restaurar la confianza y dinamizar la concesión de créditos.
Los mercados financieros ya habían descontado la bajada de tipos, lo que ha empujado a la baja a las tasas interbancarias. Por ejemplo, el Euribor a doce meses, la referencia de las hipotecas en España, se situó hoy en el 3,77 por ciento, frente al 3,85 por ciento de ayer.
Por su parte, el euro respondió a la rebaja de tipos con una ligera subida, que llevó a cerrar la sesión a 1,2737 dólares, frente a los 1,2690 dólares de ayer.
El BCE también ha anunciado la rebaja de la facilidad marginal de crédito, por la que presta dinero a las entidades, hasta el 3 por ciento, así como la facilidad de depósito, por la que remunera el dinero, hasta el 2 por ciento, con efectos a partir del 10 diciembre de 2008.