9:49 | 'Lo importante es respaldar la actividad e impulsar confianza ahora. Los próximos seis meses son de importancia capital', dijo el economista jefe de la entidad
París (Reuters) - Los Gobiernos deberían estar dispuestos a incrementar su gasto en programas de estímulo económico si las circunstancias lo requieren, dijo el economista jefe del Fondo Monetario Internacional (FMI) Olivier Blanchard en comentarios publicados el martes.
Además, en una entrevista con el diario francés "Le Monde", Blanchard pidió en particular a Alemania que aumente su gasto en los próximos meses, como ya han solicitado algunos de sus socios europeos, entre ellos Francia.
"Los próximos meses serán muy malos. Es esencial detener esta pérdida de confianza, ofrecer estímulo y, si es necesario, reemplazar la demanda privada, si queremos impedir que la recesión se transforme en una Gran Depresión", dijo Blanchard a Le Monde.
El economista agregó que el Fondo mantenía su meta del 2 por ciento del producto interno bruto global para el estímulo fiscal requerido, pero advirtió que se podría necesitar aún más.
"Si las circunstancias lo requieren, los Estados deben estar listos para hacer más, 3 por ciento o más si es necesario", dijo, agregando: "debemos pensar sobre eso ahora porque no es fácil gastar sumas de dinero tan grandes en forma eficiente".
Alemania ha sido criticada por algunos otros países europeos, especialmente Francia, por no estar preparada para gastar más en un programa de estímulo a nivel de toda la Unión Europea, para reactivar el crecimiento mientras la crisis financiera global golpea a la economía real.
Berlín dice que revisará su programa de estímulo en enero para ver si se necesita un mayor gasto.
"Lo importante es respaldar la actividad e impulsar la confianza ahora. Los próximos seis meses son de importancia capital", dijo Blanchard.
"Si Alemania no participara de una forma suficiente en este estímulo, muchos otros países también dudarían a la hora de hacerlo y el efecto sería desastroso para Europa", advirtió.
Blanchard también criticó la decisión de Gran Bretaña de reducir el impuesto al valor agregado en 2,5 puntos porcentuales, diciendo que no influirá en forma significativa la conducta de los consumidores.
En contraste, dijo que una medida francesa destinada a alentar las compras de autos era una buena idea.