Farid Matuk: 'La reducción de 5,2% de pobreza es una cifra inverosímil'
9:30 | El ex jefe del INEI durante el gobierno de Toledo cuestionó los resultados y pidió más transparencia en medición
Farid Matuk, ex jefe del Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI) durante el gobierno de Alejandro Toledo, dijo que la reducción de 5,2 puntos en el porcentaje de pobreza es una cifra inverosímil, como también lo es la variación de 9,4 puntos respecto a la cifra oficial del 2005 (48,7%).
"Me gustaría saber en todo caso qué dicen el señor Alva Castro, el señor César Zumaeta y otros que me atacaron cuando anuncié que la pobreza del 2006 había sido de 48%, lo cual significaba una reducción de 6 puntos durante el gobierno de Toledo", expresó en conversación con El Comercio desde Iraq. Cuando el INEI ajustó la metodología, la pobreza oficial del 2006 pasó a 44,5%.
Matuk pidió al INEI publicar el programa de cómputo elaborado por el equipo de Javier Herrera (ver recuadro en la nota de arriba), en base al cual se imputan los valores monetarios a los bienes consumidos por la población en pobreza. "Yo creo que lo que él hace es un producto artístico, no reproducible y agradable a los ojos de los que lo aprecian. Pero no es un producto científico". Según Matuk, cuando él fue jefe del INEI, la institución terminó por contratar a otro investigador, pues Javier Herrera, quien hace la medición de pobreza para el INEI desde la gestión de Félix Murillo, nunca quiso entregar el programa de cómputo con el cual replicar los resultados.
Por su parte, para Herrera, las afirmaciones de Matuk son completamente falsas y que los programas de años anteriores sí han sido entregados al INEI. También afirmó que los programas empleados en esta última medición de la pobreza se entregarán dentro de algunos días, tal como lo pide el comité asesor liderado por el Banco Mundial.
Vale precisar que tanto durante la gestión de Farid Matuk como en la actual línea de pobreza se estableció otorgar valores en soles a los bienes mínimos que deben consumirse para cumplir con el requerimiento calórico. Este último lo establecen organizaciones internacionales, como la Organización Mundial de la Salud y la FAO.