La economía española se contrae un 4% en el segundo trimestre
A pesar del desplome, el PIB modera su retroceso frente a los primeros meses de 2009 con un 0,9%
EFE - Madrid - 30/07/2009
La economía española sigue presa del desplome del consumo. Según ha adelantado hoy el Banco de España, el Producto Interior Bruto cayó un 4% en el segundo trimestre del año respecto al mismo periodo de 2008, pero en comparación con el primer trimestre el ritmo de caída "fue más contenido", con un descenso del 0,9%. Tal y como afirma en su último boletín, las principales razones de esta contracción son, una vez más, la caída en un 6% de la demanda nacional -tanto del consumo como de la inversión- que ha traído acarreada la "peor crisis" en la historia de España, según ha reconocido hoy la propia ministra del ramo, Elena Salgado.
* La reforma del mercado laboral es "clave" para una recuperación "sóllida"
Si el INE, que emplea más indicadores en sus cálculos, confirma esta cifra el próximo 14 de agoso, se trataría de la cuarta caída del PIB en tasa intertrimestral, después de hacerlo el 0,2% en el tercer trimestre de 2008, el 1% en el cuarto y el 1,9% en el primero de este año, y del tercer descenso en tasa interanual tras el 0,7% y el 3% de los dos trimestres anteriores. En cualquier caso, ya supera las previsiones del 3,6% del Ejecutivo para el conjunto de 2009.
No obstante, aunque persiste la tendencia a la baja de la economía, el organismo presidido por Miguel Ángel Fernández Ordóñez destaca que el ritmo de caída de este último periodo es más "contenido" que en los meses precedentes. En concreto, atribuye este alivio a una cierta ralentización del descenso de la actividad y del ajuste del mercado laboral dentro de una situación de "cierta normalización" de los mercados financieros y unas condiciones externas "menos severas".
Esta situación ha permitido detener las continuas revisiones a la baja en las previsiones de la economía mundial, aunque, advierte, no ha cambiado el diagnóstico sobre la duración de la recesión, que se prevé muy prolongada con una salida muy gradual.
Dentro de la demanda, el consumo los hogares sigue cayendo debido, principalmente, al "notable" deterioro del empleo, que se redujo el 6,8% en el último año mermando las rentas salariales de las familias a pesar de que durante los últimos mes está registrando caídas menos acusadas. Además, a favor de una futura pero lenta recuperación, el descenso de la capacidad de gasto de los hogares se vio parcialmente compensada por los menores pagos de impuestos y las mayores prestaciones sociales recibidas, así como por la recuperación de los índices bursátiles, que incrementaron la riqueza financiera y ayudan a suavizar la estadística.