La especulación alimenta una nueva burbuja bursátil con las inmobiliarias
LALO AGUSTINA | Madrid | 19/08/2009 | Actualizada a las 03:31h | Economía
Hoy se cumple una semana de locura para las inmobiliarias, en la que algunas de ellas han llegado a duplicar su valor, haciendo millonarios a los operadores intradía y ayudando a sus accionistas estables a reducir las pérdidas de sus ruinosas inversiones. Es como si hubiera vuelto Enrique Bañuelos, el fundador de Astroc (hoy Afirma), o se estuviera reviviendo la guerra de opas entre Joaquín Rivero y los Sanahuja por controlar Metrovacesa o se reprodujera la brillante salida a bolsa de Renta Corporación. En mitad de agosto, con un sol abrasador, las inmobiliarias hierven en bolsa sin que los analistas ni las propias compañías encuentren una explicación plausible a las revalorizaciones. "No hay ninguna noticia con suficiente peso para justificar lo que está pasando", comenta un analista.
Los datos son de los que quitan el hipo. La acción de Metrovacesa, ahora controlada por la banca tras la insolvencia de la familia Sanahuja, pasó de menos de 16 euros el pasado miércoles a los 35 a los que se llegó a cambiar ayer. Colonial, también en manos de las entidades financieras, elevó su cotización de los 13 céntimos por título a los 24 en el mismo periodo. Pero la estrella de las inmobiliarias en bolsa ha sido Reyal Urbis, cuyas acciones casi se han triplicado.
¿Qué está pasando? Hasta ahora las respuestas no parecen convencer a nadie. Natalia Aguirre, directora de análisis y estrategia de Renta 4, dijo ayer que "el mercado puede estar interpretando que el sector ha tocado suelo en Estados Unidos y el Reino Unido, y aunque aquí va con retraso, la bolsa estaría anticipando esa recuperación".
En España, sin embargo, continúa habiendo alrededor de un millón de viviendas sin vender y las cuantiosas ofertas de bancos y cajas para liberarse de sus activos tampoco ayudan a estabilizar el mercado. En Renta 4 creen que, además, no sería de extrañar que algunos fondos estuvieran tomando posiciones en las inmobiliarias, que, al tener tan poco capital flotante - los accionistas de referencia controlan con holgura estas empresas-,provocan elevadas subidas con sus compras.
Con todo, Aguirre recomendó ayer muchísima cautela a los inversores porque, según su opinión, las inmobiliarias continúan siendo una opción bastante especulativa, muy arriesgada. Ayer tocó repliegue tras los beneficios acumulados en los últimos días, quizás por la lógica recogida de beneficios. Colonial encabezó las caídas del mercado, con un retroceso del 11,98%.